sábado, 27 de diciembre de 2014

Compartir complicidad literaria

Siempre me ha gustado leer, desde que era una niña. Pero sin duda este año ha sido mi resurgir lector.


He leído en el tren

Compartimento de tren (Edward Hopper, 1938)

He leído en la cama

http://montserrat-blog.blogspot.com.es/2012/08/leyendo-en-la-cama.html

He leído en el sofá



He leído en verano



He disfrutado de tardes en soledad leyendo y saboreando un café con leche

Alexander Deineka (1899-1969)- Young girl reading

Hay días en los que un libro ha sido una buena compañía

Mujer leyendo, Carl Larsson (1853-1919)

Y momentos de lectura en buena compañía



He leído a mi querida Isabel Allende y he dejado entrar a nuevos literatos y nuevas temáticas. He pedido consejo y he cogido consejo, algo que hasta ahora o quizás hace tiempo que no hacía. 
Me encanta compartir esa complicidad literaria, no sé, es una sensación que me llena y me hace feliz.
He recuperado mi pasión por la lectura y es gracias a las personas que estáis ahí compartiendo con los demás lo que leéis, con entusiasmo y con sinceridad, a través de vuestros blogs.
También es gracias a mis amistades lectoras, a las que les puedes contar esa locura que te da cuando entras a una librería o una biblioteca.
Y gracias a ti amigo, por tu paciencia, por tu cariño y por tus consejos lectores, me conoces tan bien...









domingo, 14 de diciembre de 2014

Ventajas de dormir...más bien poco

Sin comerlo ni beberlo hoy me he caído de la cama rondando las 6:00 a.m. ¡qué agotador! Hace mucho tiempo que no recuerdo lo que es dormir a pierna suelta y levantarme fresca y renovada.
Sigo en mi idea de darle la vuelta a las cosas y convertirlas en positivo, podría ser eso de menos por menos igual a más.

Ahí van las ventajas:
Puedes desayunar a las 6:00, volver a desayunar a las 8:00, almorzar a las 10:00 y si me apuras te puedes tomar un piscolabis a las 12:00. Ideal para una dieta saludable.


Empatizas con el reino animal, los mapaches y osos pandas te estarán eternamente agradecidos por ponerte en su piel.


Podrás optar al premio “Ama de casa del año”, tu casa estará lista y resplandeciente en un pispás. Serás la primera en la panadería y te dará tiempo a limpiar tu trocito de acera. Tus vecinas te envidiarán…mmm ¿cómo se organiza? ¡Cáspita, hoy se me ha adelantado!




Organizarás como una autómata tus álbumes de fotos, apuntes, libros, tu ropa (por colores, camisas, pantalones, etc.).
Prepararás como una loca bizcochos, cocas saladas, macarrones para cinco, cupcakes, una tortilla de patata desestructurada, etc. Harás sombra al mismísimo Ferràn Adrià.


Y al final acabarás compartiendo un absurdo estado en tu muro de Facebook y escribirás una entrada en tu blog un poco a lo loco.

Y claro, a media tarde darás una cabezadita entre los apuntes (con baba incluida) y te despertará un aroma a “se le está quemando algo a alguien” y ese alguien, por supuesto, eres tú.

lunes, 8 de diciembre de 2014

Meeting again

La noche ya se había colado en el aquel largo día, y a poco tiempo para llegar a casa el momento se iluminó con un emotivo reencuentro.
Dos coches estacionan apresuradamente a un lado de la carretera, baja una mujer de uno y un hombre del otro; corren a encontrarse y se funden en un largo, feliz y reconfortante abrazo.


Y mientras el tiempo se ha parado para ellos la vida sigue y una magnífica luna llena ilumina el momento, las hojas secas caen al son del gélido viento y el abrazo se difumina entre risas y preguntas que se van amontonando (¿cómo estás?, ¡cuánto tiempo!, ¿qué tal te va?...)

Sigo observando con todos mis sentidos hasta que el momento se aleja de mi vista y suspiro…y entonces imagino... y una ráfaga de viento me devuelve a la realidad.



Todavía sigo creyendo en la magia de las casualidades, y no sé a veces pasa, que te encuentras con alguien que hace años que no ves en el sitio más insólito e inimaginable, pero no es lo habitual.
A mí esas cosas no me suelen suceder, y hay personas a las que echas de menos y no las encuentras así  de repente, saliendo del metro, bajando del bus, esperando a cruzar la calle…pero igual...


sábado, 29 de noviembre de 2014

Feelings

Hoy estoy estudiando inglés y me toca aprender los adjetivos que describen cómo nos sentimos. Son tantos que intento buscar una manera de aprenderlos y no olvidarlos, me conformo con interiorizar unos pocos. Ya los estudié el año pasado, pero he olvidado muchos. 
Se me ha ocurrido una idea, voy a resumir cada día de esta última semana de noviembre con alguno de estos adjetivos.


                       On Monday morning, I was very nervous and excited.


On Monday evening, I was absolutely astonished.


On Tuesday, I was relieved and exhausted.


On Wednesday, I was really anxious.


On Thursday, I was impressed and fascinated.


On Friday, I was disappointed and lonely.




Tomorrow, I hope to be delighted.



lunes, 3 de noviembre de 2014

Noviembre, quiero hacerte algunas proposiciones...

Llevo casi medio mes sin escribir una entrada, la verdad es que estoy un poco baja de energía y parece que no acabo de recargar mi batería. Pero bueno, voy a reiniciarme y a intentar darle la vuelta a esta espiral de pesimismo en la que he entrado otra vez.



¿Qué me he propuesto empezar a hacer este mes de Noviembre?

  1. Perder algo de peso.
  2. Pasarme al té, poleo, manzanilla,….y dejar el café un poquito de lado.
  3. Seguir en la búsqueda activa de empleo.
  4. Retomar esa mega lectura en la que me he embarcado.
  5. Ver más pelis y series en inglés, sin subtítulos en español.
  6. Leer las entradas pendientes de los blogs que sigo.
  7. Descuidar menos el tiempo con la familia.
  8. Estudiar, estudiar y estudiar.
  9. Necesito un poco de vida social.
  10. Escribir una entrada por semana.
  11. Ver a esa gente que echo tanto de menos.
  12. Sonreír más.
  13. Reírme mucho más.
  14. Y si en este camino de propósitos puedo ayudar y hacer feliz a alguien, lo intentaré.


Seguro que me dejo algo, necesito pequeñas metas para seguir adelante, cada vez me cuesta más ir sorteando los obstáculos del día a día.

domingo, 19 de octubre de 2014

Mi pecho derecho

Mi pecho derecho ya no es igual que el izquierdo y no pasa nada. Tiene una cicatriz pequeña (queloide) pero a mis ojos es grande. Ya puedo mirar mi pecho y no me importa tanto, las cicatrices conforman mi vida y ya no me pesan.
Hay partes del cuerpo que duelen más que otras por la intimidad que comportan, jamás imaginé que la extirpación de un sencillo fibroadenoma en mi pecho derecho me desestabilizara en cierta manera. Ese rechazo a mi misma me hizo bajar la guardia y hace un par de semanas me di un pequeño susto con el otro pecho, afortunadamente son quistes  de líquido.

www.ampar.org
Muchas mujeres siguen sin visitar al ginecólogo y no se auto-exploran los pechos, debemos empezar a romper ciertos tabús. Seguro que al leer esto te acuerdes de alguien, si lo haces, anímale a que haga sus revisiones ginecológicas periódicas.
Ahora me gustaría hablar de ellas, de las mujeres que luchan contra el cáncer de mama, a las que debemos recordar y acompañar en su día a día. Y recordar también a todas aquellas personas que sufren alguna enfermedad
No puedo imaginar lo que debe ser una mastectomía. Son ellas, mujeres valientes que lo han sufrido las únicas que lo saben. Sólo ellas, que lo han vivido en primera persona pueden hablar de cómo se sienten, pero nosotros mujeres y hombres debemos estar a su lado, escuchando, comprendiendo, respetando su proceso.

Cada año se celebra hoy 19 de Octubre el día contra el cáncer de pecho como recordatorio del compromiso de toda la sociedad en la lucha contra el cáncer de pecho. No soy muy de celebrar días para cada cosa pero pienso es una manera buena de no olvidar.
A lo largo de nuestra vida nos encontraremos por desgracia con enfermedades que nos cambiarán físicamente. Pienso que es necesario que  desde nuestra infancia se nos empiece a educar en valores que nos enriquezcan como personas.
Hoy, mañana, pasado, todos los días SUMÉMONOS AL ROSA, hombres y mujeres, TOD@S.






sábado, 18 de octubre de 2014

Conectar, congeniar, hacer buenas migas...

A veces sucede que conectas con la gente sin apenas hablar, con una mirada, un gesto, una simple sonrisa…No sé, es una sensación extraña pero tan maravillosa.

Sobre todo sucede si no sucumbimos a esos malditos prejuicios que parece que llevamos guardados en algún bolsillo.
Siempre me entrego a las personas, sin saber, sin preguntar, sin cuestionar su pasado y sin esperar a que a estas personas les suceda lo mismo. No toda la gente te brinda la oportunidad de conocerte, simplemente te juzga por su primera impresión o por lo que les han hablado de ti.
Soy una persona muy tímida, y a veces me hace parecer antipática, lo tengo asumido y más viviendo en un lugar pequeño en el que pesa más tu origen que tu valor como persona. Me refiero a que no eres Abril, si no la forastera que ha llegado de la gran ciudad, “-Miradla que estirada es”. Realmente no hacen por conocerte, pero sí que hacen por criticarte. ¡Qué ironía!.
Es extraño de explicar, esa sensación cuando conoces a alguien y “suena love is in the air”, pero no es que te hayas enamorado en el sentido romántico sino que la energía fluye, el tiempo se detiene y te sientes bien.
Y conectas y luego congenias y sin contaros mucho lo sabéis todo.Y otro día descubres que compartes muchas cosas en común y al siguiente sabes que "hacéis buenas migas".
Y no significa que os pongáis a cocinar unas “migas”, que tampoco sería mala idea, sino a ese significado que conlleva la expresión, a esa buena conexión y concordia que había entre los pastores trashumantes que juntos preparaban este plato después de un arduo camino y un duro trabajo.

Así es, conectáis en este camino tan farragoso que es la vida, y preparáis ese plato de conversaciones, confidencias, anécdotas y lo hacéis sin prejuicios.

  

sábado, 11 de octubre de 2014

¡Llevadme a Marte!

Estos días me he estado acordando de la misión Mars One, el primer viaje a Marte sin retorno y me han dado ganas de ser una de las aspirantes.
Quizás me ha venido a la mente ante la posibilidad de que La NASA evalúa la opción de hibernar a los astronautas para abaratar el viaje, y me he imaginado ahí…en letargo, sin noticias de nada, en desconexión total…Uf, ¡qué gozada!
Ha sido una de esas semanas de “cabrearme mucho”: por las tarjetas opacas, la espantosa gestión del Ébolala ejecución de Excálibur, la inhabilitación de un juez, Arias Cañete en el Parlamento Europeo y algunos comentarios deshumanizados de esa humanidad que cohabita con nosotros.

Lo peor de todo esto es esa gente que no siente ni frío ni calor, que parece que viva en la inopia. He encontrado un cierto paralelismo de la situación con el juego infantil “el escondite” ¿os acordáis de la frase “por mí primero y por todos mis compañeros”? Pues en la sociedad actual es por mí, por mí y por mí, mis compañeros ya se apañarán.

Últimamente tengo esa percepción, es un “sálvese quien pueda”, me imagino el Titanic hundiéndose y esos malvados ricachones subiéndose a los botes salvavidas.  
Está ocurriendo lo mismo, los ricos se salvan y los pobres mortales nos estamos quedando sin fuerza, sin esperanza…
Sigo "cabreada" y eso me ayuda a no estar “triste”, y me impulsa a seguir hacia delante, a no quedarme callada, a decir lo que pienso y a actuar en consecuencia.
Bueno, al final como siempre me falta un poco más de argumentación, ¿verdad?
Lo sé, he de argumentar más, pero me pierdo bastante en las palabras. Poco a poco mejoraré, he tenido que volver a aprender muchas cosas.


elmundodepatricia.com



Hubo un tiempo de letargo en mi vida (más largo incluso que el que propone la NASA) y desaprendí muchas cosas. Aunque parezca raro muchas veces también desaprendemos, nos marchitamos, nos olvidamos de las cosas importantes, pero lo importante es volver al mundo, nunca es tarde.


viernes, 26 de septiembre de 2014

¿A qué huele el otoño?

¡Ay,el otoño!
Para mí, el otoño huele a libro comprado, regalado o que se fía.
Huele a hogaza de pan recién comprada en la panadería.
Huele a café con leche y murmullo de cafetería.
http://www.kiwilimon.com/

¡Ay, el otoño!
Huele  a algodón de azúcar y a feriante, a mazorcas y a castañas.
Huele a frío por las mañanas.
Huele a tierra mojada y a lluvia en las ventanas.
floristerialamaceta.com

¡Ay, el otoño!
Huele a trenes, vaivenes y reencuentros en los andenes.
Huele a tristeza cuando tú no vienes.
http://vagondesastre.es/

¡Ay, el otoño!
Huele al azul de tu mirada y a tu voz pausada.
Huele a mi añoranza y a tu templanza.

Huele a esperanza.
http://felicidadpropia.wordpress.com/



sábado, 13 de septiembre de 2014

El día que regalé todos mis chándales...

El día que regalé todos mis chándales…

 imagen de mividaentuventana.blogspot.com
Es curioso como los seres humanos buscamos excusas para todo. Mi excusa perfecta para usar el chándal, casi como un uniforme de trabajo, era “la comodidad”. En aquel entonces los días caían del calendario sin sentido, el dolor físico me estaba consumiendo y me escondía entre anchísima ropa.
Pues sinceramente estaba peor, esconder mi cuerpo no era la solución. Pero entonces llegó el día de la revelación, ¿no os ha pasado nunca?, de repente algo te ilumina y ¡zas! tomas una decisión, y la llevas a cabo.
Una mañana vacié mi armario, doné todos mis chándales y empecé a mostrar mi cuerpo tal y como era, apartando mis complejos y miedos. Los miedos también afectan y a veces como mujeres preferimos pasar desapercibidas a ser el blanco de miradas desagradables (ese tema requeriría otra entrada, ya hablaré de ello más adelante).
Mi revelación tal vez fue ocasionada por esas conversaciones que sin querer escuchas cuando compartes el transporte público. Dos mujeres hablaban de lo bien que se sentían  sin hacer nada los domingos con su chándal puesto, ambas se pasaban toda la semana “de punto en blanco” en su trabajo y “los domingos de chándal” eran una liberación para ellas. Entonces comprendí que para mí el chándal era una esclavitud y que podía gastar otro tipo de ropa de “sport” y disfrutar del resto de ropa todos los días.
imagen de www.ibicasa.com
Es un proceso lento, el volver al mundo que frecuentabas antes y mostrarte de nuevo a los demás. Vas dando pequeñas pinceladas, un día te miras al espejo y te gusta lo que ves, otro día te pintas los labios y al otro sonríes sin darte cuenta. Son minúsculos detalles que refuerzan tu autoestima y te ayudan a llevar mejor otros aspectos de tu vida.
Y en este proceso, te inspira mucha gente sin tú darte cuenta y a la inversa también ocurre “muchas personas llegan a tu vida y no saben el cambio tan importante que producen en ella”. Paso a paso tu autoestima mejora y empiezas a brillar por dentro y por fuera.
Continuamente pasamos por malos momentos en los que es fácil abandonarse, pero pienso que es importante sacar un poquito de fuerza e intentar vernos bien, no por los demás si no por nosotros mismos.
Conclusión, chándal sí…pero con moderación. Con lo variada que es la ropa ¿por qué quedarse sólo con una prenda?
Hay que ver lo extraños que son algunos plurales, no consigo hacerme a la palabra chándales (de chándal terminado en –l forma el plural con –es), lo he buscado por si acaso, ya que me sonaba tan raro.
Aquí termina mi insulsa entrada, mi inspiración debe estar de fin de semana…



imagen de atipicaliving.blogspot.com

martes, 9 de septiembre de 2014

Canta otra vez "Lemon" para mí

Año 93, mi vida transcurría entre libros y asignaturas que mi cerebro no era capaz de asimilar. Mis horas pasaban despacio en aquella aula con ventanas al patio y sus consecuentes distracciones con la clase de gimnasia. Éramos un alumnado variadito y variopinto, la verdad sea dicha. Ya se cuidaban mucho de dividir al alumnado según sus capacidades y a los que estábamos “sin etiquetar” nos mezclaban y ¡gualá! una  clase no apta para cardíacos.

Imagen de yasalud.com
Siempre hay alguien que añade un poco de limón a tu vida y allí estaba él, guapo, guapo de los que duele mirar, moreno, estatura media, ojos castaños y vivos, cabello color chocolate y una voz de las más sexys que he escuchado nunca ( algo parecida a la de Jorge Sanz). Yo como siempre sosa, sosa y más tímida si cabe.

Maniobras del destino nos sentábamos cerca, cerquísima y él que era muy majo entre cambio y cambio de asignatura me deleitaba cantando en inglés, puesta en escena incluida.

Recuerdo con cariño Lemon de U2, así fue como conocí al grupo. Él y su inseparable compi me cantaban el principio de la canción con el "ah-ah-ah" incluido con el que Bono empezaba.



Ah…
Ah-ah-ah
Ah…
Ah-ah-ah
Lemon, see through in the sunlight
She wore lemon,
But never in the daylight




!Ains, qué recuerdos!

Ayer me acordé de aquel chico, que probablemente si no hubiese sido por mi timidez seguramente sería hoy mi amigo, siempre me llenó de halagos y yo, pues…como me suele pasar, muerta de vergüenza. ¡Ay, la adolescencia y las inseguridades!

Canta otra vez Lemon que yo te escucho…

miércoles, 27 de agosto de 2014

El suavizante de mi abuela

Cierro los ojos y puedo verla, sentirla, es mi abuela. Sus ojos verde-grises tan particulares me miran desde la puerta de entrada a su piso. Evoco a mi abuela a través de los diferentes olores y aromas que quedaron impregnados en mi mente, lo hago desde cada rincón de la casa en la que vivió.
Así era ella , magnifica cocinera , paciente con sus guisos. Se me escapa un suspiro al pensar en aquel puchero tan delicioso que preparaba, puedo ver el caldo como plácidamente humea desde la mesa, y ahora desde la cocina veo como nos sirve de una fuente repleta de garbanzos, carlotas, patatas, pencas, carne…
Puedo sentir el sabor especial de aquel caldo (único e inimitable) a través del aroma que desprendía. Se amontonan diferentes platos en mi cabeza, huelo a huevos fritos y patatas, a cachopo, saboreo su arroz al horno, me sirvo un platito de paella y me pongo un vaso de naranjada.
En pocos pasos he llegado al patio, un pequeño jardín en medio de tanto ladrillo. Antes he pasado por el baño y me he embriagado con el agua de colonia, de aroma fresco y suave.
La puedo ver en el patio entre sus geranios, claveles, dracenas…quitando cuidadosamente las hojas secas, algo que me he dado cuenta que también hago yo de manera inconsciente. Ella tenía un don para las plantas, a su lado les esperaban unos años de mimos y delicados cuidados.
aromas by Abril Stork
Vuelvo a cerrar los ojos, estoy oliendo un suavizante (de los que no compro normalmente) y se me eriza la piel. Inspiro de nuevo ese evocador aroma y me traslado a su florido jardín. La ropa se bate de lado a lado en un pequeño cordel y puedo ver a mi abuela descolgando la ropa y hablando conmigo. Seguramente me dirá: “ ̶ No patisques, deixa la roba damunt del llit i anem a dinar i després el cul a la cadira i els plats ja els netejarem més tard”(“ ̶ No padezcas, deja la ropa encima de la cama y vamos a comer y después el culo a la silla y los platos ya los limpiaremos más tarde”). Después de la sesión “cul a la cadira” no faltaba un buen tazón de café con leche, si se terciaba algún trozo de coca dulce también caía.

nubes by Abril Stork
Me invade la tristeza, vuelvo inspirar de la botella de suavizante; miro mi patio, alguna de sus plantas que conservo y la ropa tendida. Enjuago las lágrimas entre mis dedos y sonrío. He encontrado el suavizante de mi abuela y ahora estoy un poco más cerca de ella. Siento tristeza por quizá no habernos conocido del todo bien, pero me siento feliz porque con el paso de los años he logrado entenderla mejor.
Me despido "iaia", queriéndote y recordándote siempre entre esos aromas que me acarician y me llevan a ti.
Y te doy las gracias por esa madre tan maravillosa que me disteis tú y mi abuelo.

sábado, 23 de agosto de 2014

Despedidas y cafés en la recámara

En este bullicio del siglo XXI entrarán muchas personas en tu vida que no se quedarán en ella. A veces nos separan sucesos trágicos o traumáticos como un enfado, una ruptura o una inesperada muerte. Otras veces sucede que se cruzan nuestros caminos,
Como se cruzan las carreteraspara después volver a separarse,se cruzaron tu vida y la mía;dardos hacia la diana de nuestra lotería.
Un filón de suertes que se mezclan.

¿Por qué se cruzan las vidas que se tocany luego vuelven a separarse?

Alquimia en el laboratorio Kosmos del doctor Noestamossolos.
 
Manolo García, Por respirar
Son personas que cohabitan un tiempo en nuestra existencia y a las que después debemos dejar marchar, y así es, se cierra un ciclo y se abre otro. Siempre queremos pensar que es posible mantener un contacto pero a veces la realidad es más complicada de lo que imaginamos o intuimos. 
Los días pasan,te acostumbras a su presencia y empiezas a reconocer en su voz, su mirada y sus pausas pequeños detalles de su personalidad, te gusta su cercanía. Llámalo aprecio, cariño, admiración, no sé...
Ya forma parte de tu partido a partido, pero sabes que la liga no dura eternamente y pronto llegará la despedida.
Y llegado el día, la incertidumbre te invade ¿qué le digo? : -"Bueno, ya nos veremos". -"Hasta la próxima". -"Suerte, cuídate". Y ¡zas! se adelanta al discurso que tenías preparado, te deja con la boca abierta (se despiden con algo bonito, lo dejaré ahí) ¡y ala! se queda todo en un "to be continued...". 
Vale, lo dejáis en un punto y seguido. Y luego viene la parte de las promesas vanas, los cafés que sabes que
Despedidas, by Abril Stork
no tomaréis porque se quedarán en la recámara y las conversaciones que se quedarán en simples mensajes de texto. 
Leído así suena extraño, ¿verdad? quizás "el tomar un café y conversar" no significa lo mismo para mí que para otra persona, no lo sé. 
Al final es lo que pasa, siempre hacemos promesas que no cumplimos. Si me hubiese tomado todos esos cafés que quedamos en tomarnos probablemente podría pasarme un año entero sin dormir.
Y al final con la distancia que trae el paso de los días, te das cuenta de los inspiradoras y buenas que fueron aquellas personas en tu vida, aunque inevitablemente las eches de menos.